jueves, 5 de agosto de 2010

Edicion 88

De Aquí y Un Poco Mas Allá

El tiempo y lo vertiginoso de los acontecimientos no operan a nuestro favor. Apenas quince días y ya parece muy lejano, que publiqué mi artículo titulado “¿Cómo entender a los políticos y como creer en Ellos?”. Sobre de él, el Diputado Fernando Palomino, líder de la bancada del PRI en el congreso local, replica recetando unos números y cifras, datos fríos y duros, les llama, que por supuesto no desconozco puesto que se han hecho del conocimiento público aunque no los convierto en un moderno Oráculo de Delfos.

Para nadie pasa desapercibido que nuestro Estado ha sufrido un deterioro, o mas bien un retroceso en los niveles de bienestar de la población en general con respecto al último sexenio que encabezó su partido; pero ésa relatividad tampoco es indicador indiscutible de que estábamos cerca del paraíso en cuando a desarrollo humano. El maquillaje de cifras fue patente de corzo, como lo es ahora, así como el ocultamiento de la realidad: baste recordar la vergonzosa e inhumana expulsión del estado de indígenas, dispersando familias hacia estados que no eran su origen. Todo previo a una magna reunión de Priistas de todo el País y demostrar que aquí no hay pobreza. Los “abajo firmantes” que protestamos por la medida, fuimos acosados “sutilmente” y por supuesto descalificados y luego calificados de subversivos. Autoritarismo en su más pura expresión. Simulación sin par.

Me agrada que el Diputado haya superado la tentación de la descalificación fácil, lo que invita a mantener el nivel de respeto en las argumentaciones que propone. Todas las preguntas que en mi colaboración se plantearon no han tenido respuesta satisfactoria. Dejo al lector su análisis y conclusiones invitándolo a releer ambas colaboraciones; la mía del 19 de Julio y la réplica del Diputado Palomino del 27 del mismo mes (en un estricto orden de aparición). Que sean los lectores los jueces. De mi parte sostengo y reitero: “¿…….que nos sirvan, a la sociedad de Aguascalientes como hace doce años o mas?, no gracias”.

Por último, solo dejo una reflexión al Diputado: no se necesita ser mayoría en un congreso para legitimar una acción de gobierno, aunque ésta vaya en contra del interés colectivo. El poder de una minoría “legitimadora” en el País lo ha llevado y arrastrado a la ruina. Digo, solo es un ejemplo.

Pero para que esperar a que se entronicen los nuevos representantes y autoridades en el estado. La actual legislatura tiene todavía una gran oportunidad de servir a la Sociedad de Aguascalientes. ¿Cual será la postura de la bancada Priista ante las reformas a la constitución sobre la protección a la vida desde la concepción? ¿Guanajuatizarán Aguascalientes criminalizando a las mujeres que bajo circunstancias específicas tengan necesidad de interrumpir su embarazo? ¿Se impondrán los dogmas religiosos a la razón jurídica? ¿Se habrá considerado como problema de salud pública los abortos clandestinos? ¿Ya analizaron la última encuesta sobre el tema?

Inútil resulta preguntar al otro líder de bancada, el del PAN. Es predecible su postura y la de su partido con respecto a la propuesta de reforma llamada “anti aborto”. Han oído pero no escuchado los argumentos que plantean con coherencia Verona Valencia y Marcela Martínez Roaro. Seguramente leyeron en éstas mismas paginas, el 28 de Julio, la entrevista que les hizo Susana Rodríguez en la que fijan la postura de las organizaciones civiles en pro de los derechos de las mujeres. Denotan desesperación impotencia y rabia, que les hace subir el tono de voz, ante la falta de argumentos de la diputación que no ve más allá del dogma. Bien, pues ahí tienen la gran oportunidad de terminar su gris periodo de tres años con honor.

Ya con ésta me despido. La muerte de Ignacio Coronel no es lo que mas me ha llamado la atención. Se dejaba venir. El ejercito, la PGR, la SIEDO, Policía estatal de Jalisco, Policía Municipal de Zapopan, vecinos y sociedad casi toda, sabía que éste personaje vivía allí desde hace tiempo. La revista proceso, premonitoriamente o mera casualidad había dedicado unas páginas dando a conocer una semblanza delictiva del capo quince días antes. Probables pactos rotos dicen los especialistas en el tema como Ricardo Ravelo, Jose Reveles y Edgardo Buscaglia.

Coinciden también en que la rabia no se acaba, sino que alertan sobre una posible escalada de violencia como respuesta de los carteles. Parece que la inteligencia no acaba de enseñorearse en ésta rebautizada lucha.

Lo que mas llamó mi atención fue conocer el modus operandi de algunos sicarios que asesinaron a 14 jóvenes durante una fiesta que se celebraba en Torreón. Estos asesinos salieron de la cárcel (CERESO le llaman ahora) de Gómez Palacio en un convoy de vehículos oficiales, con armamento oficial y se dirigieron rumbo a Torreón a ejecutar y disparar “a todo lo que se moviera”. Pero cuando salieron de la cárcel, no fue por haber cumplido condena, sino con la autorización de la directora del penal y cumplida su tarea, regresar a sus celdas.

Margarita Rojas Rodríguez es el nombre de ésta disfuncional funcionaria de quien resulta muy lógico imaginar que no permitía la salida de reos por labor de readaptación. Grandes cantidades de dinero circulan desde los penales, útil para seguir delinquiendo y sobornar a cuanta autoridad se ponga enfrente; plomo o plata reza la consigna. Plata fue la opción para Ella. Plomo para otros.

El hecho era conocido y aplaudido por muchos, incluidos naturalmente los familiares de los presos quienes ya se manifestaron públicamente por su restitución en el cargo, por increíble que parezca. Plena descomposición del tejido social es la resultante de éstas criminales conductas de autoridades y funcionarios y, mientras obtenga beneficio, por aberrante que sea, un sector de la sociedad. Es tiempo de revisar, como tantas tareas pendientes, el sistema penitenciario, aunque espero que no se ocurra la salida fácil de privatizar las cárceles del país.

P.D. Que pena que los súbditos se queden sin Reyna