martes, 11 de mayo de 2010

Edicion 76

Campañas en el nombre de Dios

02 de Diciembre de 2000.- Las crónicas periodísticas dan cuenta del primer día de actividades de Vicente Fox como Presidente de la República, el primero de un partido que no era el PRI, en algo más de setenta años de dominio del cargo. Estuvimos pendientes de la protesta rendida ante la soberanía representada en el congreso de la unión y no tardamos en recibir la primera sorpresa: el señor Fox, rompe el protocolo y sus primeras palabras las dirige a sus hijos, mandando a segundo término a los diputados y senadores.

Los desplazados del poder, los priistas ardidos, pendientes de cualquier tropezón, palabra, frase, gesto, insinuación, etc., se arrancaron las vestiduras y se azotaron en el suelo por el desacato al protocolo; ¡¡mira que saludar a sus hijos antes que a nosotros!!. ¡¡Ahí esta la prueba de lo que nos espera!!. ¡¡Es una provocación abierta y una burla a las instituciones!!......Y en ese tono continuaron los líderes de opinión priistas en entrevistas a noticiarios y a cuantos quisieran escucharlos.

El colmo fue la chamaqueada que les plantó el lenguaraz de las botas cuando en un intento de hacerle notar el republicanismo Juarista, por parte de la bancada priista, coreaban el ¡¡Juarez…Juarez…Juarez!! a propósito de ver amenazado el respeto al estado laico. A punto de un ataque de locura, los opinantes del momento no daban crédito a la acción en que Paulina Fox le entrega en mano a su padre un crucifijo; esta acción ya fué entre cuates en el auditorio nacional y no parte del protocolo en San Lazaro.

Afirmaban su postura de respeto al estado laico y la separación del clero de las actividades republicanas; les fue verdaderamente ofensivo que el guanajuatense asistiera a la basílica de Guadalupe a misa antes de acudir al congreso. La fotografías de Fox comulgando fueron un gancho al hígado.

Eso sucedió hace diez años. Ha habido una metamorfosis en el PRI. Ahora es diferente en cuanto a su interpretación de “laicidad”. No cabe duda de su modernización en las formas de hacer política. Particularmente en el sexenio actual en la pequeña aldea. Olvidaron los epítetos a Fox por su marcada manifestación religiosa así como guardaron silencio con las expresiones rituales del virrey antes de acudir al congreso local en sus informes o, peor aun, sus celebraciones públicas en sus cumpleaños a los que acude presuroso el obispo de Ecatepec.

05 de Mayo de 2010.- Las crónicas y las graficas son evidentes en referencia al arranque de campaña del candidato a gobernador del estado del PRI, senador con licencia Lozano de la Torre y la candidata a la presidencia municipal de la capital Lorena Martínez. Con fervor se acercan a pedir al todo poderoso que los ilumine en su campaña y que los votantes aprecien y entiendan sus propuestas. Ningún escenario mejor que catedral y que mejor oficiante que el vocero de la diócesis.

En cuanto a la candidata Lorena, solo desdibujó su arranque la media noche previa en colonias conflictivas y necesitadas de atención; unas cuantas horas y algunas bendiciones echaron a la borda la acción política bien pensada.

Solo esperamos que, de lograr sus objetivos ambos contendientes, no los veamos bajo palio en posteriores celebraciones religiosas; que no olviden que el Estado Mexicano es un Estado Laico. Que es totalmente valido y respetable su creencia, pero que su ejercicio público, particularmente en campaña, es un alarde religioso en busca de votos.

Y si se es tan devoto, les recomiendo la lectura de la parábola del fariseo y el publicano. (Lucas 18, 9-14).

El día seis de Mayo se celebró el primer “debate” entre contendientes al gobierno del estado. Independiente de las manifestaciones de “triunfo” (discurso clásico así como el de la autoridad que balbucea que quien gano fue la ciudadanía), poco hay que mencionar del mismo. Pero no podemos pasar por alto la desorganización y los nervios de todos los involucrados; desde un moderador que olvida de inicio las replicas a la primera intervención, pasando por los discursos huecos que no aportan nada.

¿Dónde quedaron las propuestas claras? Se le olvidó al candidato del PRI que uno de sus pilares de campaña es la abolición de la tenencia. A los tres se les olvido hablar de una gestión con austeridad o del combate a la corrupción o de un adelgazamiento de la burocracia o de una rendición de cuentas transparente o de una impartición de justicia pronta y expedita. Cualquiera que llegue ¿borrón y cuenta nueva?

Pero fue el primer debate. Habrá mas, mínimo uno. Y que ya no salgan con sus discursos odiosos sobre quien ganó. Las porras no son votos. Mientras, otra vez la misma exigencia: no invadan la privacidad hablando desde los llamados call center; estamos hartos de escuchar estupideces sobre lo maravillosos que son los candidatos, tanto como hartos estamos de escuchar la radio con reiterados spots tratando al escucha como idiota que no entiende. Gracias por la atención.